- El Departamento de Justicia de Estados Unidos continúa presentando pruebas para comprobar los nexos de García Luna con el narco
El caso que pesa contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón, podría prolongarse más de lo contemplado, pues el Departamento de Justicia de Estados Unidos continúa presentando más pruebas en su contra.
Recientemente informó a la Corte Federal del Distrito Este en Brooklyn, Nueva York, que integrará otras 4,900 grabaciones de testigos al expediente criminal en contra de García Luna.
El documento firmado por el fiscal federal, Breon Peace, anota que al expediente del exfuncionario agregará también otras 7,500 páginas en evidencias que lo implican con el narcotráfico en México.
De acuerdo con las pruebas reunidas, Genaro García Luna trabajó para el Cártel de Sinaloa y fue clave para su expansión criminal.
“Con base a los materiales actualmente en posesión del gobierno, anticipamos que produciremos 7,500 páginas adicionales de un folio de materiales de 3,500, también aproximadamente 5 aparatos electrónicos y aproximadamente 4,900 audios de testigos cooperantes”, indicó el fiscal Peace a la Corte en Brooklyn.
“Para los que dicen que no hay nada contra García Luna la Fiscalía de Estados Unidos tiene en su poder 6 mil 100 páginas de evidencia en su contra, además planea generar otras 7 mil 500 más
cuatro mil 900 grabaciones de testigos colaboradores; hay muchos que andan nerviosos”, señala desde su cuenta de Twitter César Gutiérrez Priego, hijo del General de División DEM Jesús Héctor Gutiérrez Rebollo y quien durante 16 años lo ha defendido ante tribunales federales y militares por denunciar actos de corrupción de políticos, diputados y senadores, así como algunos gobernadores que tenían relaciones con narcotraficantes.
Las nuevas pruebas son un complemento de lo que desde 2019 ha venido presentando a la Corte el Departamento de Justicia de Estados Unidos contra García Luna, entre las que hay grabaciones de audio, videos, computadoras con información y documentos financieros; todo esto recopilado por los fiscales estadounidenses, de México, Colombia, Panamá y otros países.
Entre las acusaciones que pesan sobre el también amigo, confidente y mano derecha de Calderón, están el que lo señalan como la cabeza de una red que premiaba con sobornos a periodistas afines y castigaba con amenazas a sus detractores, directamente financiada con dinero que recibía del Cártel de Sinaloa. Se le acusa también de urdir un plan desde la cárcel para intimidar a testigos dispuestos a declarar en su contra.
Los abogados del exfuncionario niegan rotundamente las acusaciones y se han enfrascado en una batalla judicial para evitar que esas evidencias sean aceptadas y retrasar el inicio del juicio hasta el próximo año.
La defensa argumenta que necesita tiempo para revisar tantas evidencias que producen los fiscales del Departamento de Justicia, por lo que solicita que, en lugar del 24 de octubre de este año, el juicio se realice el próximo 9 de enero de 2023.
También aseguran que García Luna fue una figura clave en la detención y extradición de Jesús “El Rey” Zambada en 2010, y que los dichos del delincuente no son creíbles porque forman parte de una “vendetta” contra quien lo hundió.
Por su parte, el juez Cogan determinó que no se realizarán más audiencias en la Corte de preparación de juicio y pondera la solicitud de postergarlo, que presentó la defensa de García Luna, encabezada por el abogado de oficio, César de Castro.
Con información de La Opinión de Los Ángeles