Como ya lo habíamos adelantado en Chihuahua Exprés desde el pasado 23 de agosto, el exgobernador César Duarte Jáquez salió de su celda en el Cereso No. 1 de Aquiles Serdán durante la noche de este lunes para ser internado en el hospital privado Star Médica a causa de complicaciones en una cervical.
Su abogado, Ricardo Sánchez Reyes Retana, confirmó hoy este hecho y prefirió reservarse el estado de salud del expriísta, hasta que no tenga un informe del doctor que lo intervendrá.
Será este miércoles en el transcurso de la mañana que Duarte entre a quirófano por el padecimiento que cuenta desde que sufrió un accidente en uno de sus helicópteros cuando era Gobernador, en agosto del 2015, mismo por el que se pedía por parte de su defensa una Nota Diplomática con carácter de urgente ante el Departamento de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica a fin de que Duarte fuera atendido inmediatamente por el personal de salud correspondiente mientras estaba recluido en una cárcel de Miami, Florida, poco antes de concretarse su extradición.
Según las fuentes de este periódico, desde medidos del mes de agosto, el equipo jurídico del exmandatario hacía las gestiones para que él pudiera salir del Cereso y agendarse su segunda cirugía durante su estadía en Chihuahua, pues es de recordar que en junio pasado, Duarte estuvo cinco días internado en el hospital Christus Muguerza por una intervención laparoscópica para colocación de malla en hernia inguinal derecha.
De acuerdo a la Fiscalía General del Estado (FGE), la salida se autorizó por el Juez de Ejecución de Penas, Ernesto Armendáriz, el día 12 de septiembre, luego de que el médico particular solicitó que se le practicara un procedimiento de intervención quirúrgica mediante abordaje cervical.
Una vez que se concluya el procedimiento quirúrgico, serán los médicos tratantes quienes determinen el tiempo de recuperación, para determinar de igual manera, su regreso al Centro Penitenciario.
La autoridad apuntó que, como en ocasiones anteriores, la persona privada de la libertad ha rechazado la atención médica por parte del Estado y como cualquiera de ellos, tienen derecho a manifestar la solvencia económica, por lo que los gastos que se deriven de este procedimiento, corren a cargo del imputado.