El obispo de la Diócesis de la Tarahumara, Juan Manuel González Sandoval, condenó hoy los ataques al templo de Guachochi y dijo que “es un reflejo del grado de barbarie al que se ha llegado por la violencia y la impunidad”.
Mediante un manifiesto, demandó a quienes están involucrados en los grupos delincuenciales a que “rectifiquen su camino” recodaron que todos somos hermanos “y el don más preciado que nos ha dado Dios es la vida del cuerpo y alma”.
El obispo González Sandoval recordó que la balacera en la comunidad de Santa Anita en Guachochi, incluyendo su templo, reflejan los niveles de barbarie por la violencia y la impunidad que se vive en la Sierra Tarahumara.
“A casi un año de la terrible muerte de dos de nuestros Sacerdotes y dos laicos, como Iglesia de
Tarahumara y sociedad, nos entristece y nos provoca mucha indignación los hechos que han
sucedido en la Comunidad de Santa Anita, Guachochi”.
Añadió que producto de la inseguridad se dan los desplazamientos y el temor por todos estos hechos violentos.
“Pedimos y exigimos de nuestras autoridades que busquen caminos, estrategias y políticas que nos lleven a la paz social, donde haya oportunidades para todos y como consecuencia se logre el orden y la paz que nuestra Patria Mexicana tanto necesita y anhela”, dijo.
Obispo Juan Manuel González Sandoval. Foto: Cortesía