Si bien hace un mes la misma gobernadora de Chihuahua se descartó de forma categórica, el día de ayer el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, volvió a señalar a Maru Campos como presidenciable, situándola nuevamente en el punto de mira. No obstante, la gobernadora volvió a desmentir hoy en primera persona dicha posibilidad, así como el supuesto enojo con el presidente municipal Marco Bonilla por la cena con los empresarios de la radio y la televisión.
La gobernadora fue cuestionada a su llegada a Palacio sobre las palabras de Marko Cortés en la 96 Convención Nacional de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión ayer en Chihuahua, incluyéndola entre los presidenciables de la colación “Va por México” -PAN, PRI y PRD- para el 2024, la titular del Ejecutivo Estatal reiteró que su dirigente sabría que no tiene contemplado abandonar su cargo por este tipo de aspiraciones.
“Él sabe que no, que estoy dedicada a Chihuahua, a mí me van a tener que aguantar aquí cuatro años y medio más”, aseveró, dando por zanjado este tema.
Mientras, sobre las palabras del sí aspirante a la candidatura por Morena, Ricardo Monreal, en la Convención de la CIRT destacando la labor y el buen hacer de la gobernadora en Chihuahua durante su mandato, Campos Galván refirió que “así habla él, hay que tomarlo como algo positivo no como algo negativo”.
Ayer, durante el evento de inauguración de la Convención Nacional de la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión, la gobernadora hizo un comentario alusivo a la cena de bienvenida que había brindado el alcalde Marco Bonilla a los participantes y en la cual la mandataria no estuvo presente. Esto disparó los rumores de un supuesto enojo de la gobernadora por no haber sido invitada, lo cual hoy desmintió la propia Maru Campos.
“No, nunca me enojé yo con el alcalde Bonilla, al contrario, nos llevamos muy bien, estábamos cotorreando públicamente que había dejado a toda la CIRT con resaca después de la fiestiquis”, aclaró la mandataria.