A nadie se le desea un mal, pero el karma llega siempre, lento a veces, pero llega a cobrar.
Todos tenemos alguna cuenta pendiente, y habría que saber que todo se paga.
Javier Corral hizo enemigos por su modo de gobernar; se excedió en el uso del poder. Hay cheques millonarios que se firmaron por extorsión, y hubo tortura en la que fuera la Casa de Gobierno.
Encarceló, pudiendo permitir otras medidas cautelares. Se solazó viendo desnudos a sus presos políticos.
La vejación a la dignidad de tantos, no tiene perdón de Dios.
Creo, por las vísperas, que aquí a nivel terrenal tampoco nos vamos sin pagarlo.
Así es el karma, lento, pero elegante.
En las denuncias saldrán las injusticias. Más le valdría a Javier no hacerlas.
Y creo que debería andar con Sheinbaum. Aquí ya no cabe, y él lo sabe.
Son muchos los agravios, y más los agraviados.
Se tiene que ir, o se encierra.
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