¿Cuánto desearía Javier Corral andar por Chihuahua libre, sin escolta, como lo hacen otros que gobernaron en el estado.
No es gratuito que sea repudiado. Sé que le debe doler, es un individuo.
Sabe lo que hizo, y muchos lo sabemos, y lo hemos sufrido solidarios al lado de las personas que estimamos.
Muchos sentimos la persecución a Maru (Campos) como propia, y nos indignó la forma de echar por la borda su oportunidad de hacer algo por Chihuahua.
Corral se equivocó completamente y confundió ser gobernador con el poder de los reyezuelos de los antiguos reinos, donde el soberano hacía lo que le daba la real gana.
Si alguno de los acusados tenía alguna cuenta. Él y sólo él, la desapareció al volverlos víctimas del abuso de la autoridad.
Nadie hace justicia violando la ley.
Eso fue lo que a Corral le salió mal. Creyó estar por encima de la ley, extorsionó, torturó y encarceló, violando derechos fundamentales, y ahora, sufre las consecuencias.
Su pueblo no lo conoce y el que deseó adoptar no lo tolera, pero lejos de reconocer sus errores, ha buscado cobijo debajo de la falda de la candidata oficial.
Allá ella porque quien traiciona una vez, traiciona siempre, y Corral no tiene palabra. Tiene lengua, y es viperina, para acusar con oratoria falsa pero ágil y ha vulnerado la ética de jueces y magistrados que hoy viven en el oprobio y la vergüenza, y hasta hoy, han sido incapaces de corregir los errores.
Nunca es tarde para hacer lo correcto. Pido con humildad, ruego, si es preciso, con humillación sincera, perdón y disculpas a quienes he ofendido si deciden hacer lo correcto.
Ese día me inclinaré públicamente para reconocerlo. Su vida, como la muchos, incluso la mía necesita restaurarse y lo sabemos.
En Chihuahua hay nobleza para abrirle los brazos a quien corrige con sincera actitud.
Saben que Duarte puede ser enjuiciado con su casa o el hospital por cárcel. Y si lo vencen en juicio que regrese a la celda. Háganlo, es su derecho y es su facultad como jueces.
La ley es la ley, y la preventiva excesiva y la negativa del derecho a la salud son innecesarios a menos que se le quiera hacer daño y cometer delitos.
Ustedes tienen la palabra.
Posdata. Los delitos electorales ahora públicos y los moches a los funcionarios, también públicos, no le ha merecido un comentario a nadie. Ni a Maru, que, mínimo debería poner orden en casa, o dar un golpe en la mesa, para que sepan quién manda.
Pero no, lejos de eso, ya quieren ir por Cruz y está bien, vayan. Si debe que pague, pero sin violar leyes, sin cerrar los ojos acá y abrirlos allá.
¿Acaso somos salvajes que desconocen los procedimientos?
La ley es para todos, no para quien se odie, o para que se le aplique al que se señala desde el poder.
El poder es para poder, pero parejo. Linchar públicamente, no es lo correcto. Acusen, prueben, castiguen, apegados al derecho y a la división de poderes.
César Duarte está en la cárcel por la lengua de Corral. No hay nada más, sólo lo que él dijo para engañar al pueblo que votó por él.
¿Pruebas? Ninguna. ¿Eso es correcto? Corrijan. Están apenas a tiempo.
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