- El experto en artes marciales fue ejecutado afuera de su gimnasio de la capital potosina
Fernando N, conocido como El Tiburón, quien le dio una brutal golpiza a un joven en un establecimiento de Subway en San Luis Potosí, fue asesinado ayer a balazos afuera de su gimnasio ubicado en la colonia General Martínez.
Un cable del periódico capitalino 24 Horas, preciosa que de acuerdo con las primeras versiones, la víctima llegó al lugar donde se encontraba un hombre armado, quien abrió fuego en al menos 5 ocasiones para después huir.
El cuerpo, quedó tendido sobre la calle Iztaccihuatl.
Al lugar arribaron elementos de Seguridad y de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar fe del suceso.
Además, se informó que se abrió una investigación por este crimen, aunque una de las líneas de investigación apunta a un ajuste de cuentas.
Cabe mencionar que Fernando N estaba libre desde diciembre de 2023, luego de obtener su libertad tras lograr una suspensión condicional del proceso.
Fernando abandonó el penal de La Pila tras permanecer cuatro meses en calidad de imputado, ya que fue vinculado a proceso el 11 de agosto por el delito de homicidio calificado, en grado de tentativa agravado.
ElTiburón fue captado por una cámara de seguridad en una zona restringida para clientes del Subway, cuando entra y le reclama a un joven empleado, a quien golpea en repetidas ocasiones.
El video se hizo viral en las redes sociales.
Debido a las lesiones, el empleado tuvo que ser hospitalizado.
Además, se reveló que el agresor practicaba artes marciales y era profesor en el gimnasio Tiburones Team, sitio donde ayer fue ejecutado.
Además de presumir ser un combatiente profesional, Medina realizó una licenciatura en derecho.
El Tiburón interpuso un amparo contra la vinculación a proceso para solicitar reclasificar el delito como lesiones graves y no de homicidio, por lo que tras la protección de un juez federal consiguió su proceso en libertad, pagó la reparación del daño y tenía prohibido acercarse al menor.
Cuando salió, la señora Erika, mamá de la víctima, denunció que”era algo que ya se veía venir ya que él tiene un buen bufete de abogados. Tiene mucho dinero y era fácil de que saliera. Era de esperarse”.