WASHINGTON.- La página editorial del New York Times, uno de los diarios más longevos en Estados Unidos con 172 años de vida, dijo este viernes en su editorial que Joe Biden, “debería de abandonar la candidatura presidencial por el bien del país”.
El diario, catalogado como de un liberalismo moderado, añadió que “el mayor servicio público que el señor Biden puede prestar ahora es anunciar que no seguirá presentándose a la reelección”.
A su vez, otro diario que goza igualmente de gran prestigio, The Washington Post, fue más mesurado pero igualmente contundente para precisar, en su editorial de este viernes que Biden “al menos debería cancelar sus planes de fin de semana para pensar en ello (dimitir)”.
The Wall Street Journal dijo a su vez en su editorial de este viernes que “Joe Biden “debe renunciar a la carrera por la reelección tras demostrar en el debate de ayer que ya no está capacitado para gobernar otros cuatro años”.
La portada de la revista Time fue igualmente impactante. Con fondo rojo y un Biden saliendo en su extremo derecha con una sola palabra “Pánico” (panic).
Este viernes se desataron múltiples comentaristas prominentes que dijeron que no les dio placer decirlo, pero habían llegado a la conclusión lamentablemente de que “es hora de que Joe se vaya”.
Estas voces incluían al economista ganador del Premio Nobel Paul Krugman, Tom Friedman, Nicholas Kristof, Jonathan Alter, David Ignatius y el ex congresista Joe Scarborough, el presentador de Morning Joe de MSNBC.
Todos dijeron que ante el desastre en el primer debate, la posibilidad de que Biden cambie las preferencias de Trump “son demasiado difíciles como para arriesgarse en mantener su candidatura”.
Una pregunta justa: ¿A quién le importa lo que piensen estos chicos? Pero hay una respuesta innegable: Biden sí.
A esta ola de voces, la Oficina de Campaña de Biden precisó por la noche que el demócrata “no abandonará la carrera presidencial por su desempeño en los debates”.
Pero hay pocas posibilidades de que estas voces no estén captando su atención, y es probable que incluso estén hiriendo sus sentimientos. Como han escrito sus colegas, Biden es un espectador habitual de Morning Joe y a menudo cita lo que ha oído. (En este caso, será más probable que cite al cónyuge de Scarborough, Mike Brzezinski, quien dijo que todavía quiere a Biden como candidato).
Friedman, un columnista de asuntos exteriores ganador del Pulitzer para el Times, dijo que considera al presidente “un amigo mío” ya que estaban juntos en un viaje oficial después del 11 de septiembre. Dijo que vio el desmayo de Biden, deteniendo el rendimiento del debate en CNN solo en un hotel de Lisboa y “me hizo llorar”.
Ignatius, un comentarista de política exterior del Washington Post, dijo que el debate simplemente ratificó lo que se volvió “obvio hace casi un año: Que el presidente Biden no debería postularse para un segundo mandato”.
La vociferancia y los argumentos superpuestos de los expertos y las páginas editoriales fueron sorprendentes. Pero también subrayaron otra realidad: al igual que la edad (cumple 82 años este noviembre), sino los desvaríos frecuentes.
Las voces que piden a Biden que abandone y llame a una convención demócrata abierta en Chicago en agosto para seleccionar a un candidato más imponente de manera uniforme dijeron que estaban motivados por el desdén por Trump y el miedo a lo que podría hacer si regresa al poder.
Trump y su movimiento político, sin embargo, son en sí mismos una expresión de lo poco que importan las voces del establecimiento bien acreditados en la era moderna.
Trump logró la nominación republicana en 2016 al vencer a los reyes históricos del Partido Republicano en la clase ejecutiva. Si las páginas editoriales importaran mucho para dar forma a la opinión pública, Trump habría sido descartado hace mucho tiempo en la nominación presidencial.
Para el caso, Biden en el concurso de nominaciones demócratas de 2020 habría sido la primera opción de pocas de esas personas que ahora le aconsejan que se enfrente a lo obvio sobre su edad avanzada y su retirada de habilidades políticas.
Al sismo que Trump reunió a un movimiento que emociona con sus ultrajes retóricos y su comportamiento que retoma aquel antaño poderío norteamericano, Biden reunió a un movimiento de personas que calcularon que al menos podría vencer a Trump.
En el apogeo de la guerra de Vietnam, en 1968, el presidente Lyndon B. Johnson, por leyenda, vio un comentario devastador sobre la guerra de Walter Cronkite en el CBS Evening News y concluyó: “Si he perdido a Cronkite, he perdido a Centroamérica”.
Cincuenta y seis años después, si Joe Biden ha perdido a Joe Scarborough, probablemente sea cierto que perdió a personas influyentes en los prestigiosos distritos de Washington, Nueva York, Los Ángeles y San Francisco. Esas personas son muy importantes para Biden. Sin embargo, importarán mucho más si estimulan a las personas que realmente se han enfrentado a los votantes, los demócratas de alto rango en el Capitolio o los gobernadores para que tomen medidas.
Hasta ahora, hay muchos funcionarios electos que asienten con la orden acuerdo con los comentaristas, e incluso susurran en privado a sus oídos, pero que no dicen nada de eso en público.
Biden no abandonará la carrera presidencial por su desempeño en los debates: Oficina de Campaña
Los medios también señalaron que Biden participará en la segunda ronda de debates con Donald Trump prevista para el 10 de septiembre.
“El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no tiene intención de abandonar la carrera presidencial por el fracaso, desde el punto de vista de otros miembros del partido y expertos, en los debates televisados, dijo a The Hill el portavoz de la campaña de Biden, Seth Schuster .
“Por supuesto que no va a abandonar”, reiteró Schuster.
CNN también señaló que miembros de la campaña de Biden dicen que el actual presidente de Estados Unidos no tiene intención de abandonar la segunda ronda de debates con Trump el 10 de septiembre.
Anteriormente, The Wall Street Journal afirmó que entre los demócratas del Congreso estadounidense se desató el pánico por lo que consideran una actuación fallida de Biden en los debates. Algunos demócratas esperan encontrar un nuevo candidato para las próximas elecciones. Sin embargo, según el periódico, los patrocinadores del partido ven con escepticismo la opción de reemplazar a Biden antes de las elecciones.
Los primeros debates televisados ante el presidente actual y anterior tuvieron lugar el jueves en Atlanta. A Biden y Trump se les prohibió tener puntos de discurso durante los debates. Según una encuesta rápida de CNN, dos tercios de los espectadores dijeron que Trump ganó el debate.
El 5 de noviembre se celebrarán las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Trump ya ha conseguido suficientes votos de delegados para ser nominado como candidato presidencial republicano. Biden, que aspira a la reelección, ha conseguido suficientes votos demócratas. Sus candidaturas serán aprobadas oficialmente por sus partidos a finales de este verano.
