En el marco de la Cuarta Sesión del Consejo Estatal de Protección Civil este lunes se acordó por unanimidad una nueva Declaratoria de Emergencia por Sequía 2024 tras escuchar a los expertos que refirieron que este año concluirá con unas precipitaciones de entre el 60-70 por ciento de lo que habitualmente registraba la entidad, un aumento de las temperaturas por el calentamiento global y la previsión de un primer tramo del 2025, de enero a abril, especialmente seco. Asimismo, la gobernadora Maru Campos Galván, en su carácter de presidenta del Consejo Estatal, anunció que el próximo año se incrementará hasta los mil millones de pesos el recurso para la atención, prevención y paliativos ante la sequía, en sus diferentes vertientes, apoyos a la población con entrega de maíz y frijol, apoyos para productores en forma ayudas e insumos, programa de empleos temporales,… La mandataria hizo un llamado a la sociedad civil y sector productivo agropecuario e industrial a ser solidarios y pensar en la reconversión de cultivos, un consumo responsable del agua y avanzar en la diversificación económica.
“Estamos atravesando tiempos complicados en materia hídrica”, afirmó la gobernadora, advirtiendo sobre la necesidad de medidas efectivas y el apoyo de la ciudadanía para enfrentar esta emergencia.
Campos destacó el impacto del cambio climático en el estado, con el incremento global de temperaturas y la disminución de precipitaciones en el territorio chihuahuense, lo cual ha exigido un consumo de agua cada vez mayor. Además, mencionó el impacto del fenómeno de La Niña, que podría prolongar la baja en las lluvias hasta el año 2025.
La administración estatal ha duplicado año tras año su inversión en recursos para contrarrestar los efectos de la sequía. La gobernadora anunció que para el 2023 se destinaron $220 millones de pesos y, en respuesta a la gravedad de la situación, este año se alcanzará una inversión de $600 millones de pesos. Para el 2025, el objetivo es llegar a los $1000 millones en proyectos de infraestructura hídrica, en colaboración con la Secretaría de Desarrollo Rural, el DIF estatal, y la Secretaría de Desarrollo Humano y Bien Común.
Campos instó a la población a adoptar un consumo responsable del agua y a adaptarse a las nuevas realidades ambientales. Destacó que los ciudadanos, especialmente los agricultores, contarán con el apoyo del gobierno en la adaptación de técnicas de riego más sostenibles. La gobernadora subrayó que el gobierno está comprometido a responder de manera oportuna a esta situación y a proteger a las comunidades rurales que dependen de las cosechas, asegurando que no están solas en esta crisis.
“Lo más sabio que sabemos hacer como sociedad y como instituciones es adaptarnos”, concluyó Campos, reafirmando el compromiso estatal para enfrentar juntos los retos que plantea la sequía prolongada en Chihuahua.