El alcalde de Chihuahua, Marco Bonilla Mendoza, calificó como “muy responsable” el Paquete Económico firmado por la gobernadora del estado, Maru Campos, para el ejercicio fiscal 2025. Destacó que se trata de un presupuesto no deficitario, un logro alcanzado por el gobierno estatal desde el inicio de su administración, lo cual, según el edil, es un reflejo de una gestión eficiente y responsable.
Bonilla resaltó que el presupuesto está “súper balanceado” en los ejes prioritarios que, desde su perspectiva, debe seguir el gobierno estatal. Entre estos cinco ejes esenciales, mencionó la salud, la educación, la seguridad, el desarrollo económico y, finalmente, el desarrollo social.
En este sentido, destacó que el paquete económico tiene un enfoque claro en fortalecer la infraestructura y los programas de salud y educación, dos sectores fundamentales para el bienestar de la ciudadanía.
Uno de los puntos que más resaltó el alcalde fue el aumento significativo en el presupuesto destinado al área de Desarrollo Rural. Bonilla subrayó la importancia de esta área, especialmente considerando la crisis hídrica que enfrentará el estado en el próximo año, debido a la sequía que se avizora como una de las más severas en las últimas tres décadas.
Según el alcalde, la gobernadora ha tomado las previsiones necesarias para afrontar las consecuencias de la sequía, que podría afectar gravemente el ciclo agrícola, obligando a los productores a vender ganado a precios bajos debido a la falta de pastura y agua. En este contexto, destacó como “muy loable” el esfuerzo por incrementar los recursos destinados al sector rural para mitigar los efectos de esta emergencia.
Bonilla también aprovechó para señalar la falta de acciones concretas por parte del gobierno federal ante esta crisis, recordando que, a pesar de los graves pronósticos, aún no ha habido una declaratoria de emergencia a nivel federal. En contraste, destacó la proactividad de la gobernadora, quien ya está tomando medidas anticipadas para enfrentar la sequía.
El alcalde expresó que este tipo de medidas de previsión y atención prioritaria al campo debería servir como ejemplo para las autoridades federales, que aún no han tomado decisiones al respecto.