La gobernadora Maru Campos Galván fue preguntada este miércoles por su postura en torno a la polémica y cruce de señalamientos entre Marco Bonilla Mendoza y Cruz Pérez Cuéllar, alcaldes de Chihuahua y Ciudad Juárez respectivamente, con señalamientos cruzados a través de medios aliados, uno sobre una supuesta negación de la VISA por parte de Estados Unidos al alcalde fronterizo, y el segundo en torno a supuestos nexos de Bonilla con un grupo criminal. La mandataria exhortó a los presidentes municipales a portarse bien, a centrarse en el importante encargo que les confirieron los ciudadanos en las urnas y aseguró que nadie, independientemente del partido que sea, puede «ser aliado de la violencia».
Tras abanderar a la delegación de atletas chihuahuenses que representarán a Chihuahua en los Indigenous Games que se celebrarán en Ottawa, Canadá, la gobernadora fue preguntada, entre otros temas, por los medios por su postura ante la polémica entre Cruz y Bonilla.
«Los alcaldes todos nos tenemos que portar bien, así como los gobernadores. Nos tenemos que portar bien. Tenemos que cuidar el trato que tenemos con las personas, tenemos que cuidar las actividades de nuestro equipo y tenemos que tener muy claro si estamos en estas posiciones y si se nos dio la bendición de la autoridad para ayudar y para servir, lo tenemos que hacer de manera justamente correcta y honesta», empezó refiriendo.
«Nadie, absolutamente, del partido que sea, sea de mi partido o de cualquiera, nadie puede caer en la función y nadie puede caer, por supuesto, en ser aliado de la violencia», concluyó la mandataria estatal a este respecto.