Qué impresión leer la historia contada al revés: “El diario de Frank”, publicada por Osbaldo Salvador, el pasado 3 de noviembre, en su portal, El Bordo, en el que narra una relación amorosa con Javier Corral. Y qué miedo! que un miembro de las familias víctimas, afirme que Javier Corral, siendo gobernador, envió un helicóptero a rescatar a los asesinos de su familia. Cita de la narrativa: “El 5 de noviembre Fernando Mesta obtuvo la ubicación por GPS, en tiempo real, de los sicarios que participa ron en la masacre de La Mora, y él se la enseñó a Javier Corral y le dijo que estaban escondidos en un rancho, les dijeron dónde estaban y el gobierno mandó un helicóptero que acompañó los malandros para que se pudieran ir seguros de ahí”. Es lo que declaró Julián LeBarón, a El Heraldo, ayer domingo, 6 de noviembre, en referencia a la masacre de Bavispe, en Sonora. En cuanto a la otra narrativa, de Frank, con el reportero, es muy clara e ilustrativa acerca de las pasiones que voces del pueblo le adjudican al flojo y corrupto gobernador que tuvimos en Chihuahua por 5 años. Sin embargo, eso de sus amores con Frank, no importarían, -era su decisión y en ese tipo de pasiones más vale no opinar, cada quien en su libre albedrío-, cobran importancia si la persona utilizó o se valió del poder de ser gobernador para satisfacer esos instintos sexuales, que debieron ser personales e íntimos, cuestión que no se cumple al ser públicas las quejas y declaraciones de sus víctimas, quienes dicen fueron objeto de tortura, extorsión, y los metió a la cárcel por venganza, y a los que gustaba de ver desnudos a media noche por circuito de televisión instalado ex profeso para su solaz gusto depravado, para lo cual ordenaba que los despertaran a media noche y los sacaran al patio desnudos. Eso ya no es un derecho de su inclinación sexual, eso es un delito o varios que american proceder con las denuncias, atendiendo a las víctimas del abuso de poder, por vejar, someter y exponer a las personas en forma vil y denigrante en franca violación de sus derechos fundamentales; delito imprescriptible.
Del diario de Frank cito: “Frank hacía asociar con su emotiva narración un fragmento de la canción “El Taxista” de Ricardo Arjona: Para qué describir lo que hicimos en la alfombra / basta con resumir que le besé hasta la sombra / y un poco más”.
En cuanto a la declaración de LeBaron, se desprende una urgente investigación por parte del actual gobierno, en unión o en conjunto con la FG de la federación, para que se determine, vía bitácoras de aeropuerto, si alguna aeronave -un helicóptero-salió ese día hacia la parte que se señala. De ser cierto, la actuación de autoridades debiera ser inmediata, por la gravedad y maldad indescriptible de asesinar a mansalva a las familias, que eran niños y mujeres, todos inocentes.
En fin.
Diría Don Rodrigo Díaz de Vivar al Rey Alfonso VI: Muchos males han venido por los reyes que se ausentan… y el monarca contesta: Cosas tenedes, Cid, que farán fablar las piedras.