La gobernadora Maru Campos Galván, la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia y el Consejo de la Magistratura, Myriam Hernández Acosta, encabezaron este mediodía la firma del convenio de la política pública con perspectiva de género para las mujeres “Punto Naranja” en el Poder Judicial.
En el evento también participaron la directora del Instituto Chihuahuense de las Mujeres, Neyra Regalado, la coordinadora de Justicia para Nuestras Hijas AC, Norma Ledezma Ortega, la presidenta del Congreso del Estado, Gloria Terrazas Porras, el presidente municipal de Chihuahua, Marco Bonilla Mendoza, y el secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya Chávez.
La magistrada Myriam Hernández recordó los hechos históricos que dieron origen la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, y enfatizó que la defensa de los derechos de las mujeres y la igualdad de derechos no deben quedar en el papel, sino que deben ser una convicción ideológica, una filosofía de vida y un valor social supremo, no puede haber una democracia justa sin igualdad entre el hombre y la mujer.
La titular del TSJ lamentó que la mujer sigue siendo objeto de vejaciones, discriminaciones y violencia, celebrando que “hoy el Poder Judicial nos constituimos como punto naranja, que es color con el cual al ONU identifica el 25 de noviembre (…) brindar el primer auxilio a niñas, mujeres y adolescentes víctimas de violencia”.
Destacó que en el convenio que signaban hoy se encontraban las bases de colaboración entre entes públicos y privados para la puesta en marcha de protocolos para que organismos públicos, la iniciativa privada y la academia se conviertan en puntos de atención a mujeres víctimas de los diferentes tipos de violencia. Refirió que esta violencia contra la mujer se intensifica cuando interactúa con otros factores como la clase social o la orientación sexual, entre otros.
“En esta lucha por la igualdad de género, por el respeto a nuestra dignidad, por el respeto a nuestros derechos humanos (…) no estamos solas, vamos todas”, concluyó señalando la magistrada Myriam Hernández.
Por su parte, la gobernadora Maru Campos manifestó que “es imperativo acabar con la nefasta cultura de violencia” y que “sabemos que juntas y juntos sí podemos lograrlo”.
En su mensaje al auditorio recordó que el Punto Naranja inició como un punto de resguardo inmediato para las mujeres víctimas de violencia, y destacó que hoy van mucho más allá para transformarlo en una política pública transversal.
Aseguró que cualquier mujer que llegue a este Punto Naranja a cualquier hora de cualquier día de la semana recibirá una atención de calidad por, entre otros, un ministerio público y un juez. Todo con la finalidad de “que ninguna mujer tenga que sufrir en manos de las instituciones después de haber sufrido en manos de un violentador”.