- Por cuestiones de “seguridad nacional” los accionistas chinos no pueden hacer cambios
El gobierno italiano ha utilizado su “poder de oro” y limitado los poderes de Sinochem de China como accionista mayoritario del fabricante de neumáticos Pirelli “por motivos de seguridad nacional”.
Roma consideró que los sensores que se instalan en los neumáticos fabricados por Pirelli eran una “tecnología crítica de importancia estratégica nacional” e impuso medidas que incluían restricciones al acceso a la información estratégica y umbrales de voto más altos (cuatro quintas partes de la junta directiva de la compañía) para tomar decisiones estratégicas, dijo el gobierno en un comunicado el viernes por la noche, de acuerdo al portal Político.
El nuevo umbral de voto impediría que Sinochem designe al director ejecutivo de Pirelli, a pesar de ser en realidad el dueño de la compañía.
Pirelli tiene su sede en la ciudad de Milán (Italia). La empresa, que cotiza en la Bolsa de Italia desde 1922, es el sexto fabricante de neumáticos más grande y se centra en la producción de neumáticos para automóviles, motocicletas y bicicletas. En 2015, ChemChina tomó una participación mayoritaria de Pirelli por 7 mil 700 millones de dólares y la empresa estatal china acordó mantener la estructura de propiedad de la empresa de neumáticos hasta 2023.
Las restricciones “están destinadas a crear una red de medidas que protejan: la autonomía de Pirelli y su gestión; la seguridad de los procedimientos; la protección de la información de importancia estratégica; y los conocimientos que posee la empresa”, dijo el gobierno de Roma.
La decisión se ha tomado bajo las llamadas reglas de “poder de oro” de Italia, que permiten al gobierno bloquear acuerdos o imponer condiciones cuando se trata de activos estratégicos, un poder que a menudo se utiliza hacia los inversores chinos, especialmente en el sector tecnológico.
La decisión se produce cuando el gobierno italiano dirigido por Giorgia Meloni está tratando de distanciarse de Pekín. Roma está considerando abandonar el programa de infraestructura global de China, la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI.)
Un hombre sale de un edificio de oficinas de Sinochem en Beijing, China, 21 de febrero de 2017. REUTERS/Damir Sagolj