Tras una disminución temporal en el flujo migratorio que comenzó en abril, cuando la gobernadora solicitó intervención federal, Ciudad Juárez experimenta un preocupante repunte. De acuerdo con cálculos no oficiales del secretario general de Gobierno del Estado, Santiago de la Peña, la cifra alcanza actualmente los 12 mil migrantes.
Con albergues al borde de su capacidad, gestionados por el Gobierno Federal y diversas asociaciones civiles, la falta de respuesta efectiva por parte de la federación se torna más evidente. «Hasta el momento, no contamos con una política migratoria clara ni con cifras oficiales», señaló De la Peña.
El secretario advirtió sobre la creciente inseguridad derivada del aumento migratorio, destacando algunos incidentes donde migrantes han estado involucrados en delitos de alto impacto en la región. Así afirmó se lo señaló el secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya Chávez.
Aunque enfatizó que no todos los migrantes son un riesgo, recalcó la importancia de establecer un orden para prevenir problemas de seguridad y salud. En esta línea, demandó que de una vez por todas el Gobierno Federal establezca una verdadera política migratoria y si algún migrante comete algún delito en su camino a la frontera norte, proceda a detenerlos.
El reciente aumento en el flujo de migrantes ha tensado las relaciones entre el estado de Chihuahua, Texas y el gobierno de Estados Unidos. En vista de esta situación, De la Peña insta al Gobierno Federal a tomar medidas, ya que el estado de Chihuahua no tiene facultades directas en asuntos migratorios.