La gobernadora Maru Campos se reunió líderes de organismos y cámaras empresariales de Chihuahua, con los que estableció una estrategia de trabajo para mitigar los efectos generados por la crisis migratoria, que ha ocasionado importantes afectaciones económicas, sociales y de seguridad en la entidad.
“La solución es caminar juntos, las decisiones no las va a tomar solo el Gobierno del Estado”, dijo la mandataria estatal, quien destacó a los empresarios la importancia de trabajar en conjunto.
Añadió que no se trata solo de un tema económico, sino de seguridad y de salud: “es un tema humanitario y ha sido resultado de la omisión del Gobierno Federal, ante el flujo migratorio que llega a Ciudad Juárez”.
Dio a conocer al sector empresarial que se han generado acuerdos contundentes con el departamento de Aduanas y Protección Fronteriza estadunidense (CBP por sus iniciales en inglés) para reabrir las fronteras, pero que ha sido imposible llevarlos a cabo por la indiferencia del Instituto Nacional de Migración (INM).
Afirmó que su Gobierno mantendrá la ayuda humanitaria a los migrantes, pero aclaró que no se deben suplantar las responsabilidades de la Federación.
En el mismo sentido, el secretario general de gobierno, Santiago de la Peña, mencionó que toda la política migratoria es de orden federal y que los gobiernos estatales no pueden intervenir en términos de ordenar, contener o sistematizar la migración.
María Angélica Granados, secretaria de Innovación y Desarrollo Económico, informó que desde el cierre de los puentes, han sido afectados 15 mil 578 vehículos de carga.