El secretario General de Gobierno, Santiago de la Peña Grajeda, afirmó esta mañana que tras unos meses con algo de contención e incluso disminución, el Estado de Chihuahua vuelve a presentar índices de presencia de migrantes similares a los de los pasados meses de septiembre y abril. El funcionario estatal lamentó la discrepancia de cifras en torno al número de migrantes varados en la zona de Mápula, tras ser detenido un tren por parte de Ferromex, asegurando que o bien el responsable de atender este fenómeno, el Instituto Nacional de Migración, o no cuenta bien o pretende minimizar el problema.
Cuestionado por el reporte actualizado de la situación de los migrantes obligados a bajar del tren por parte de Ferromex el titular de la General de Gobierno empezó apuntando que “ahí tenemos una discrepancia”.
Ahondando en esta idea, De la Peña aseguró que “la Comisión Estatal Derechos Humanos, las propias asociaciones que se dedican a brindar atención a los migrantes y el personal de COESPO, dependiente de la Secretaría General de Gobierno del Estado de Chihuahua, calculamos 500 migrantes de los cuales aproximadamente la mitad son menores de edad, pero el reporte que nos entrega hoy el Instituto Nacional de Migración a través de su delegado, pues ellos presentan un número de 200 personas”.
Ante esta situación, el funcionario estatal no dudó en señalar que “esta discrepancia en los números nos preocupa” porque no era nada alentador que la autoridad encargada de atender este fenómeno no dimensione bien la realidad de la problemática.
Preguntado por si interpretaba esta divergencia numérica como un intento de minimizar la situación, De la Peña aseguró que “no lo sé o simplemente fueron y no contaron bien (…) como es posible que la instancia oficial que es responsable del tema migratorio no ha alcanzado a contar ni a la mitad de los que vieron los demás o quiere decir que no lo hicieron bien o que se quiere minimizar el problema”.
El secretario General de Gobierno enfatizó que tampoco se trata exagerar la situación, pero debe verse el problema “en su justa dimensión para que las reacciones que se tengan en cualquier instancia de gobierno, pues sean las adecuadas”.
En este sentido, puso como ejemplo, que “si nosotros estamos previendo acercar un equipo de médicos o estamos previendo llevar alimentos o agua a estas personas pues no es lo mismo llevar para 500 que llevar para 200”.
De igual forma, De la Peña Grajeda afirmó que no sería cierto que la mayoría de los migrantes varados se hubieran desplazado a los albergues. En este punto, refirió que la persona responsable del albergue más grande de la capital del Estado le refirió que no habían experimentado un incremento considerable de migrantes en los últimos días, lo cual tumbaría la versión del INM.
Lamentó que, tristemente, siguen pasando los meses y continúa sin atenderse la problemática derivado de la ausencia de una verdadera política migratoria y la falta de control de los migrantes una vez ingresan a territorio mexicano, asegurando que ello hace que sólo se avance en círculos.